Capitulo 5
PROBLEMAS EN LAS DUCHAS
Esa chica postrada ante mi, era la tercera mejor nadadora de toda la escuela, era una chica algo torpe pero con un gran talento al nadar y a lado de ella, una chica con el cabello blanco la cual era la segunda mejor nadadora ella creaba diferentes formas de nadar que la hacían superior a otras nadadoras, su nombre era Celeste era como una chica ruda pero agradable a la vez ella y yo teníamos una gran rivalidad cuando entrabamos a la piscina.
La clase fue agotante ya que mi manera de nadar era rápida y constate pero si me distraía por lo menos un segundo, Celeste y Verónica me superarían rápidamente, no tuve tiempo de detenerme y apreciar el agua como recorría mi cuerpo si no sólo me concentraba en llegar a la meta y ganar.
Cuando terminó la clase la profesora nos dejó jugar 20 minutos en la piscina, los chicos gran parte preferían vernos jugar a nosotras en vez de divertirse, pero yo preferiri ir a las duchas antes que las demás ya que no soportaría ver a todas ellas desnudas frente a mi así que salir de la piscina.
-Oye Alexa ¿adónde vas?., Dijo Daniela
-Voy a darme una ducha sigue jugando en la piscina luego te veo en la siguiente clase.
-Oki entiendo.
Ya en las duchas me quite el traje de baño y cerré otra vez los ojos para tomar el baño pero esta vez que el agua caliente relajaba todo mi cuerpo, podía sentir como el mismo se via relajando poco a poco, mis piernas y también mi cintura, mi cabeza y mi pecho se relajaba después de un gran trabajo, era verdaderamente exitante no pude aguantar las ganas y empezé a tocar mi nueva conchita, era tan suave y tan exitante el tocarlo que empeze a gemir de places en las duchas.
Y sin previo aviso pude sentir como unas manos me jalaban hacia alguien, cuando abrí los ojos me di cuenta que era Celeste y me estaba besando lentamente, su lengua jugaba mi lengua tan rico que empecé a jalar su cuerpo con el mío pudiendo tocar sus pechos junto a los mío y ella viendo que me gustaba empezó a apretar mi tracero con una mano y con la otra mano la puso al rededor de mi cintura, era una una sensación tan excitante.
En eso escuchamos unas risas de unas chicas acercándose a las duchas a lo que ambas dejamos de jugar con nuestras lenguas y nos empujamos, callendo al piso las dos y yo saliendo de las duchas y dejando a Celeste en el piso.
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